Flan Huevo Coviran P-4

Un clásico que nunca ha dejado de conquistarnos, flan de huevo Covirán, para todos los paladares. Los disfrutarán desde los más pequeños de la casa a los mayores.

El origen del flan

En la antigua Roma los huevos de gallina comienzan a formar parte de la alimentación, pero como todavía no se criaban estas aves en cautividad, sus huevos eran un bien escaso.

Sin embargo en esta época ya existía un dulce que se puede considerar el antecesor del flan, se llamaba tyropatina y se hacía con huevos, leche, miel y una vez cuajaba se le echaba pimienta en polvo.

Desde luego resulta curioso que se utilizara la pimienta en un dulce, pero no podemos olvidar que por entonces el azúcar aún no se conocía (No fue hasta la Edad Media que el azúcar se comenzó a usar para endulzar los platos).

Este plato evolucionó durante el medievo consumiéndose tanto dulce como salado y su nombre era flado.

En el siglo VII la receta llega a Francia dónde se les ocurre agregar el azúcar tostado, es decir el caramelo, que cubre todo el flan una vez cuajado y frío, al darle la vuelta y servirlo.

El nombre hacía referencia precisamente a este gesto. Se llamaba «creme renversee au caramel» (reverso de crema al caramelo).

Desde Francia se extendió al resto del mundo.

Nutrientes 

En unos 100 gramos de flan  encontramos aproximadamente cinco gramos de proteínas, más de veinte gramos de carbohidratos, casi cinco gramos de grasa y otros veinte gramos de azúcar.

Es un alimento alto en calorías, pero también aporta vitaminas  A, B9, K y B3 y minerales como el calcio.